¡¡La primera vez!!

Esta mañana (por fin) he conseguido que mi incipiente tripa interactuara con el resto del mundo. jeje.
Hace ya unas cuantas semanas que se me nota la pancita, y yo intento que se note aún más. Ésto, cuando viajas en el Metro, debería surtir efecto, sobre todo en las horas punta, donde no encuentras ni un lugar libre.

Por lo general, la gente (tanto hombres como mujeres) miran de reojo la tripa y enseguida se ponen a mirar al suelo, a dormir, a leer (aunque sea con el libro al revés), con tal de evitar ceder el asiento reservado para personas en mi estado.

Pero, hoy se hizo el milagro, y por suerte para un trayecto bastante largo (de Cuzco a Aviación Española). Un señor, amablemente me cedió su asiento y yo le agradecí.

Espero que pueda contar más veces este milagro a lo largo de los cinco meses que nos quedan.


De las demás cosillas que nos van pasando, todas van bien. Mi baby no me da mucha guerra, y se queda muy quietito cuando me toca dar clase.
No tengo ningún síntoma de los usuales en un embarazo, excepto que ya siento los kilitos que he aumentado... y todavía quedan más... jejej

Estoy deseando que llegue el día 25 para verle de nuevo, ya un poco más grande y para ver si es niño o niña. También porque Leo me va a acompañar a verlo y a escuchar su corazoncito, a ver cómo reacciona y qué dice luego.